Desde la consulta del Absurdólogo de Guardia, buenas tardes. Dejen lo que estén haciendo. Apaguen la televisión. Desconfíen de sus vecinos. ¿Creen que las noticias de esta semana han sido una sucesión de eventos aleatorios? ¿Un simple reflejo del caos del mundo? ¡Inocentes! Eso es lo que ELLOS quieren que piensen.
Bienvenidos al Laboratorio de la Conspiración. El único lugar donde nos atrevemos a conectar los puntos. Porque esta semana, amigos, las piezas del puzle han encajado con una precisión aterradora. El plan maestro, el Gran Reinicio, la Agenda 2030, llámenlo como quieran, ha metido la quinta marcha. Y tenemos las pruebas. Abran los ojos, borregos.
La Premisa Inquietante
¿Qué tienen en común el mayor gasto militar de la historia, la implantación de una identidad digital con reconocimiento facial y la aparición de superbacterias en nuestras ciudades? Aparentemente, nada. Son noticias de secciones diferentes del periódico. Pero eso es parte del engaño. Son tres frentes de la misma guerra silenciosa. Una guerra por el control total.
La «Investigación»: Conectando los Hilos Rojos
Prueba A: La Amenaza Biológica (Fase 1: El Miedo)
La primera pieza del puzle nos la ha dado la ciencia. Un informe «independiente» nos «alerta» de la proliferación de superbacterias resistentes a los antibióticos. ¿Les suena? Es el mismo guion de siempre. Primero, te crean la amenaza invisible. Un enemigo microscópico contra el que no puedes luchar. Te meten el miedo en el cuerpo. Te hacen sentir vulnerable. ¿Por qué? Porque una población asustada es una población dócil. Una población asustada está dispuesta a aceptar cualquier cosa a cambio de una falsa sensación de seguridad. Es el manual del perfecto tirano, capítulo 1. No es una crisis sanitaria, es una operación psicológica.
Prueba B: La Correa Digital (Fase 2: El Control)
Y justo cuando el pánico por las superbacterias empieza a calar, ¿qué nos anuncia el Gobierno con una sonrisa de oreja a oreja? La aceleración de la «Identidad Digital Europea». ¡Qué casualidad tan oportuna! Nos lo venden como un avance, como una forma de «simplificar trámites». ¡Mentira! Es la herramienta de control definitiva.
¿No lo ven? Primero, la amenaza biológica. Luego, la solución tecnológica. Pronto nos dirán: «Para garantizar su seguridad y su salud, su nueva ID digital incluirá su historial de vacunación, sus constantes vitales en tiempo real y un registro de todas las personas con las que ha estado en contacto. Será obligatorio para entrar en el supermercado, para subir al metro, para existir». Será el pasaporte definitivo hacia la nueva normalidad. Una normalidad donde cada uno de tus movimientos estará registrado, monitorizado y analizado. Tu vida entera, en su base de datos. Es la jaula digital perfecta.
Prueba C: La Infraestructura del Gran Hermano
Pero, ¿cómo van a gestionar toda esa cantidad ingente de datos? Necesitan una autopista de la información. Y, ¡oh, sorpresa!, Bruselas ha dado luz verde esta semana a un nuevo «corredor de datos» transeuropeo de alta velocidad. Nos lo venden como algo para mejorar la competitividad de nuestras empresas. ¡Por favor! Es el sistema nervioso central de la bestia. Es la infraestructura que necesitan para que su red de vigilancia funcione sin lag, para que el Gran Hermano no se quede colgado.
Prueba D: La Fuerza de Choque (Fase 3: La Represión)
Vale, tienen a la población asustada y una herramienta para controlarla. Pero, ¿qué pasa si la gente se rebela? ¿Qué pasa si algunos «negacionistas» o «librepensadores» se niegan a aceptar la nueva realidad? Ah, amigos, para eso es la última pieza del puzle.
Esta semana, el Gobierno de Sánchez ha autorizado el mayor gasto militar de la historia reciente. ¿Creen que esos tanques, esos cazas y esos sistemas antidisturbios son para protegernos de un enemigo exterior? ¡Inocentes! Son para nosotros. Son la garantía de que, cuando el plan se implemente del todo y la gente salga a la calle a protestar, habrá suficientes medios para «restablecer el orden». Es el brazo armado del Gran Reinicio, la póliza de seguros de la élite.
El «Culpable» en la Sombra: Los Arquitectos de la Jaula
¿Y quién está detrás de todo esto? ¿Quién mueve los hilos? No hace falta ser un genio para verlo. Son los de siempre. La élite sin rostro que se reúne en Davos. Los arquitectos del Foro Económico Mundial. Los que escribieron la Agenda 2030 no como una serie de recomendaciones, sino como una hoja de ruta. Su objetivo no es un mundo más verde o más justo. Su objetivo es un mundo más controlado. Un mundo donde la libertad sea un lujo y la disidencia, un error del sistema. Un mundo donde «no tendrás nada y serás feliz», como ellos mismos han escrito.
La Llamada a la «Acción»: Despierta
No les pido que me crean. Les pido que investiguen. Que duden. Que conecten los puntos por ustedes mismos. Dejen de tragarse la versión oficial que les dan en el telediario. La próxima vez que oigan hablar de una nueva crisis sanitaria, pregunten qué nueva libertad nos van a quitar a cambio de la «solución». La próxima vez que les hablen de una «innovación» digital, pregunten a quién beneficia realmente esa tecnología.
No dejen que les pongan el chip, ni el físico ni el mental. La verdad está ahí fuera, escondida a plena vista, en los titulares de los periódicos que nos intentan vender como noticias inconexas.
Abran los ojos. Compartan esta información antes de que la censuren. La guerra ya ha empezado. Y el primer campo de batalla es tu propia mente.
(Nota del Absurdólogo: Este artículo es un ejercicio de sátira. Cualquier parecido con una teoría de la conspiración real es… bueno, probablemente no sea una coincidencia, porque son todas igual de tontas).